Duración: 15 compases 2/4.
Cambios: 15.
Dificultad: Nivel 4.
Compositor y organista, Gabriel Fauré es un nombre fundamental de la música francesa de finales del siglo XIX. Promovió una renovación de la música litúrgica inspirada en el canto gregoriano y la polifonía sacra renacentista, y obtuvo como resultado un estilo armónico que será considerado la quintaesencia de lo francés.
Análisis
Este fantástico «arco» melódico-armónico sorprende por la frescura y originalidad de la paleta armónica, y a la vez por su aparente simplicidad. Se compone de tres tramos: El primero es una progresión en tres etapas de II-V ascendentes por tono: Gm7-C7 (de Fa mayor), Am7-D7 (de Sol mayor) y Bm7(♭5)-E7 (de La menor), en el que cada «II» es el «III» de la progresión anterior.
En el segundo tramo encontramos una serie de dominantes por extensión E7-A7-D7-G7. Este último acorde es conducido como IV de Re para construir en el tercero una imponente cadencia final que alcanza el V grado mediante su II-V respectivo (Bm7(♭5)-E7).
Lo más llamativo de esta progresión es que parezca un compendio de la teoría armónica de jazz y no suene a jazz en absoluto. Nos referimos a:
- Acordes con séptima en estado fundamental (menos dos, el Dm/A de paso y el Dm final).
- Serie de II-V (cc.2-7) y II-V secundario (cc.12-13). La destacable diferencia es que aquí el II-V no «respeta» el ritmo armónico dominante en el jazz -II en parte «fuerte»-, pues aquí es el V quien está en dicha parte.
- Resolución en cadencia rota tipo V-III en cc.3-8.
- Dominantes por extensión en cc.7-10 y cc-13-14.
Pese a todo lo dicho, el diatonismo estricto de la melodía mantiene la referencia de la tonalidad principal (Re menor), o en su defecto, de su relativo mayor (Fa mayor), por ello hemos dejado de lado el análisis «jazzístico» anterior y hemos optado por cifrar las funciones con respecto a este ámbito tonal (Re menor/Fa mayor).
¡Este Requiem es la hostia! Me reafirmo: ¡La hostia!