Kurt Weill fue un compositor alemán nacionalizado estadounidense tras emigrar a los EE UU huyendo del nazismo. De formación clásica, colaboró con Bertolt Brecht en la creación de un teatro musical izquierdista con influencias de la música popular de su tiempo. Al emigrar a América obtuvo un notable éxito como autor de musicales para Broadway.

Análisis

Esta «complainte» (especie de romance en francés de asunto tenebroso) repite una y otra vez una misma estrofa mientras narra las extravagantes aventuras del villano más importante de la literatura popular francesa de principios del siglo XX: Fantomas.

Compuesta para una transmisión radiofónica, la estrofa está organizada en dos frases de 12 compases cada una, organizadas en unidades de cuatro compases. La primera frase cuenta con una progresión en dos pasos por segundas ascendentes de acordes mayores (cc.1-4, I-IV, II-V), una oscura flexión a La# (o Si♭) menor que resuelve en cadencia rota en un acorde disminuido que será precisamente el VII de la tonalidad principal (cc.5-8). La sección final (cc.9-12) es una cadencia perfecta de tipo I-V/V-V-I.

La segunda frase comienza con una sencilla progresión plagal (cc.11-14, I-IV-IV-I), continua con un siniestro bajo cromático descendente (III-II-♭II-I) cuyos tres acordes finales son menores y de la que resulta un rara napolitano menor. La sección final (cc.21.14) repite los compases finales de la primera frase.

Una moderna (y cutre) recreación del inmortal villano, pero con la fantástica banda sonora de las películas filmadas en los años 60.